Emprender es un viaje maravilloso (o por lo menos para mi), pero también es todo un viaje de emociones. Significa ser más independiente, organizado y gestionar muy bien la incertidumbre.
6 de cada 10 emprendedores sufren de estrés al iniciar su negocio
Cuando emprendemos, tenemos una ilusión desbordada por nuestro proyecto y ansias de éxito, pero también nos surgen preocupaciones relacionadas a la cantidad de tareas, gastos, deudas, tiempos y equipo. De hecho, pudiera hacer una lista de todo lo que nos preocupa 😅, pero la idea de hoy es ayudarte.
Para empezar con un poco de optimismo, te comparto algunas emociones positivas que puedas llegar a experimentar emprendiendo (o que tal vez ya vives):
- Libertad
- Satisfacción
- Autonomía
- Confianza
- Ilusión
- Involucración
- Ambición
- Estabilidad (¡Sí! Con constancia y organización puedes tener estabilidad económica)
Hablemos de gestión de estrés
Un emprendedor también puede sufrir de estrés laboral, esto significa que puede sentir que tiene más demanda que capacidad para afrontarla, también podemos describirlo como la sensación de estar «sobrecargado» y «agotado». Puede ocurrir, por falta de recursos humanos que ayuden a sacar el trabajo adelante, o por una personalidad auto-estresora, donde el emprendedor ansía conseguir resultados rápidos, le cuesta pedir ayuda y se crítica constantemente.
Te propongo algunas maneras de gestionarlo:
Recuerda porque empezaste: Al inicio de emprender, podemos tener esa sensación de que nuestros servicios no gustan o de que no estamos facturando lo suficiente, y en vez de gestionar nuestra preocupación, solemos tener el impulso de «buscar seguridad» y volver a lo mismo de antes, trabajar por cuenta ajena. Entonces antes de tomar cualquier decisión, te invitaría a reflexionar sobre porque decidiste emprender, ¿Querías mejores ingresos? ¿Crecer profesionalmente? ¿Vivir sin jefe? ¿Libertad de horarios? ¿Más tiempo libre?
Y por favor recuerda que lo que deseas construir amerita tiempo, el secreto de tu éxito se basará en constancia y trabajo duro, porque sí, emprender también significa dedicación y currárselo (al menos al inicio).
Se tu jefe soñado: Al emprender te conviertes en tu propio jefe, y si vienes de trabajar para otros, seguramente tendrás anécdotas o historias de jefes injustos, hiper exigentes, rígidos o que no daban valor a tus ideas. TEN CUIDADO Y NO TE CONVIERTAS EN ESO. Para mi es frecuente ver a emprendedores saboteándose a si mismos y siendo crueles en su cabeza.
Más bien trabaja en ser un jefe positivo, alguien humano que respete los tiempos, las ideas, que convierta los errores en aprendizajes y los retos en oportunidades. Cuida tu dialogo mental y apóyate.
Lánzate, pero con paracaídas: Algunos emprendedores encuentran tranquilidad cuando no arriesgan el 100% de su dinero. Antes de endeudarte o renunciar a tu trabajo, evalúa que posibilidades tienes para iniciarte con una mínima espalda económica que te permita pagar tus gastos mientras arrancas tu negocio y construyes tu clientela. Algunas opciones son: Ahorros, trabajar medio tiempo, si estás en España puedes capitalizar tu paro o dependiendo de tu proyecto, puedes consultar con inversionistas.
PIVOTEA: Escuche esta palabra en una formación para emprendedores en 2017 y se me quedo, pero no fue hasta el 2020 cuando el covid hizo que muchos emprendedores la pusieran en práctica. Pivotear significa literalmente moverte, cambiar de dirección y replantear tu estrategia. Si algo no está funcionando, tal vez en vez de culparte o criticarte, reflexiona que puedes cambiar o mejorar. Imagínate como un jugador en la cancha luchando por su puntaje y cambiando de posición para llegar a la meta.
Cuida tus hábitos: Para realizar cualquier trabajo necesitamos estar sanos, y esta no es la excepción. Evita los excesos, cuida tu descanso y permítete momentos de recreación. Pasear en la naturaleza, realizar actividad física o pasar tiempo con las personas que quieres son excelentes acciones para fortalecer tu salud y en consecuencia obtener mejores resultados con tu negocio.
Cuida tu mente: Desarrollar una mente fuerte y saludable es fundamental para que disfrutes tu emprendimiento. Aprender de gestión emocional y técnicas psicológicas para mantener la calma en medio del caos puede causar una diferencia. Si sientes que te cuesta manejar tus emociones, te recomiendo 100% realizar terapia y aprender a vivir mejor de una manera optimista.